Plantar los rosales en el jardín. ¿Cuándo puedes plantar los rosales correctamente?
Los rosales viven muchos años, deleitándonos la vista y el alma. Por eso, es importante asegurarnos de plantarlos correctamente. Los rosales de jardín arraigan rápidamente, - sin embargo, para una plantación exitosa, debemos tener en cuenta algunos aspectos importantes.
PERIODO DE PLANTACIÓN DE LOS ROSALES
Los rosales a raíz desnuda se plantan cuando están en estado de reposo vegetativo: bien a finales de otoño (en noviembre), bien al comienzo de la primavera (en marzo y la primera mitad de abril).
Debido a las lluvias frecuentes, el suelo se compacta muy bien alrededor de las raíces y tiene suficiente humedad para que los esquejes de rosas enraícen y desarrollen nuevas raíces. Durante el invierno, cuando el suelo no está congelado, las raíces crecen y se desarrollan.
Gracias al enraizamiento durante el invierno, los rosales tendrán más fuerza para desarrollarse en primavera y mantener luego un crecimiento vigoroso de la planta durante el resto del año. Así, los rosales tendrán una floración mucho más abundante.
Aquí presentamos algunos pasos simples pero esenciales que deben seguirse para una plantación exitosa:
Los rosales crecerán y florecerán abundantemente si el lugar elegido para ellos es soleado y bien aireado. Prefieren una exposición directa a los rayos del sol durante al menos 4 horas al día. Si plantas un rosal en un lugar con menos de 4 horas de sol al día, no se desarrollará correctamente y dará muy pocas flores, si es que lo hace.
Evita suelos demasiado secos o demasiado húmedos en los que pueda acumularse agua. Si un rosal está expuesto durante mucho tiempo a un suelo empapado, sus raíces se pudrirán y la planta se secará.
En las plantaciones de otoño, las ramas se dejan más largas y se acortan a 4-5 nudos la próxima primavera.
Cava agujeros de 40 x 40 x 40 cm, de modo que las raíces tengan a su alrededor más tierra removida y las raíces nuevas se desarrollen más fácilmente, especialmente en suelos compactados.
MUY IMPORTANTE
En las plantaciones de otoño, NO USES ningún tipo de fertilizante (ni fertilizantes químicos, ni compost, ni estiércol) que ayude al enraizamiento de los rosales si vives en una zona con inviernos fríos donde las heladas nocturnas son la norma.
Si aplicas fertilizantes en otoño para estimular el enraizamiento, es posible que las pequeñas raíces blancas, delgadas como un cabello, se desarrollen demasiado temprano y se dañen con las heladas de diciembre y enero.
En los videos del Reino Unido o de otros países con un clima más suave, verás que se recomienda el uso de fertilizantes para facilitar el enraizamiento en las plantaciones de otoño. En su caso está bien hacerlo, pero en zonas con inviernos más duros es arriesgado, porque el suelo puede congelarse hasta unos 30-50 cm durante el invierno.
¿Por qué no recomendamos aplicar fertilizantes en las plantaciones de otoño?
La mayoría de los fertilizantes estimulan el crecimiento vegetativo, pero lo que necesitamos en primer lugar son plantas bien enraizadas que puedan soportar dicho crecimiento.
La regla básica es aplicar fertilizantes orgánicos o químicos a cualquier planta después de que esté bien enraizada.
Casi todos los fertilizantes, incluido el estiércol, contienen nitrógeno. Los nitratos estimulan el crecimiento vegetativo de las plantas.
Los rosales de jardín plantados en otoño necesitan enraizar, no necesitan nuevos crecimientos vegetativos que puedan ser dañados durante el invierno.
Si las plantas tienen un exceso de savia cuando llega la primera helada (y lo tendrán si se aplican fertilizantes después de mediados de septiembre), esta savia se congelará, los cristales de hielo romperán los tejidos de las ramas y la planta morirá.
Para las plantaciones de primavera, que se realizan con raíz desnuda en marzo, recomendamos aplicar fertilizantes después de un mes de la plantación.
En las plantaciones de primavera, se pueden administrar fertilizantes que ayuden a enraizar.
Para las plantas que tienen al menos un año, recomendamos aplicar fertilizantes a partir de abril.
No recomendamos aplicar estiércol a las plantaciones de otoño, porque pocos de nosotros sabemos distinguir entre estiércol bien fermentado y estiércol incompletamente fermentado.
En otoño, los rosales se preparan para el período de reposo vegetativo. No es recomendable administrarles energizantes y/o suplementos nutricionales.
El estiércol bien fermentado (estiércol compostado) o el compost obtenido a partir de restos vegetales bien fermentados, químicamente equilibrados, se obtiene en un mínimo de 5 años y puede durar hasta 10 años.
Por la misma razón, recomendamos aplicar estiércol o cualquier otro fertilizante en las plantaciones de primavera después de un mes de la plantación, cuando podemos considerar que el rosal está bien enraizado. La regla básica es aplicar fertilizantes orgánicos o químicos a cualquier planta después de que esté bien enraizada.
¿Por qué ya no se aplican fertilizantes con la llegada del otoño?
Enlodamiento de las raíces - una operación importante
Para asimilar mejor los nutrientes, es importante que las raíces se agarren bien al suelo. Para ello, prepara un barro a partir de una mezcla de agua y tierra con una consistencia similar a la de la crema batida, e introduce en él las raíces del rosal para que se ensucien bien.
Agrega tierra fina en el fondo del hoyo y luego coloca con cuidado las raíces en el hoyo, desenrollándolas bien (es muy importante que el injerto esté a nivel del suelo, y en áreas más frías a 2-3 cm por debajo del nivel del suelo); luego rellena el hoyo con tierra y compáctalo bien para eliminar cualquier bolsa de aire.
A continuación riega abundantemente (con al menos 10 litros de agua). Si no llueve, riega cada rosal con 10 litros de agua cada 2-3 días durante las primeras dos semanas.
Atención: ¡no plantes rosales en lugares donde había rosales anteriormente sin cambiar el suelo al menos hasta una profundidad de 30 cm y en un área de un metro cuadrado!
La distancia entre plantas debe ser de al menos 50 cm para rosales con flores grandes y rosales con flores agrupadas. Los rosales trepadores necesitan un espacio mínimo de 1,5 m, mientras que los rosales llorones y los rosales de pie alto se plantan a una distancia mínima de un metro.
Los rosales trepadores se pueden plantar junto a una pared, muro, cerca o soporte especial. Si los plantas junto a una pared, colócalos a una distancia de 20 cm de ella, en una posición oblicua, con las ramas hacia la pared y las raíces orientadas en dirección opuesta a la pared.
En el caso de los rosales llorones y los de pie alto, es necesario proporcionarles un sistema de soporte, preferiblemente un poste de metal que llegue hasta el último injerto del tallo (hasta donde comienzan las ramas). Para no dañar las raíces, fija el poste en el suelo antes de plantar el rosal.
Los rosales a raíz desnuda se entregan en una bolsa de plástico que, gracias al efecto invernadero, mantiene una humedad óptima para evitar la deshidratación durante el transporte.
Si retrasas la plantación de los rosales unos días, colócalos en un lugar fresco y mantenlos en la bolsa de plástico bien cerrada. De esta manera, los rosales no se deshidratarán.
MUY IMPORTANTE: para las plantaciones de otoño hay que hacer MONTICULOS.
Hacer montículos es una operación muy importante para proteger las plantas en inviernos muy fríos. En caso de que el invierno sea muy frío y no haya nieve, el montículo protegerá el injerto contra la congelación.
A finales de noviembre o principios de diciembre, cuando las temperaturas alcanzan los -2°C, cubre el injerto del rosal con un montículo de tierra para protegerlo del frío durante el invierno.
Usa tierra bien desmenuzada. Evita los terrones. Estos forman bolsas de aire y no proporcionan una protección eficaz en caso de frío.
Haz un montículo de al menos 20-25 cm si en tu zona se alcanzan temperaturas de -10°C, o de al menos 30 cm si se trata de una zona aún más fría. Para los montículos, usa tierra traída de otra parte del jardín. No uses la tierra que está alrededor de la planta porque protege las raíces del frío.
No hagas los montículos demasiado temprano cuando la temperatura es inferior a -2°C, ya que en ese caso se formarán yemas/brotes tiernos debajo del montículo que se congelarán durante el invierno.
Si la zona tiene riesgo de fuertes heladas, con temperaturas inferiores a los -15°C, cubre el montículo con paja, ramas de árboles, mazorcas de maíz o virutas de madera.
No los cubras en ningún caso con plástico. El plástico no permite la circulación del aire y los rosales se enmohecerán.
¿Sabes por qué ya no se aplican fertilizantes con la llegada del otoño?
No dudes en contactar con nosotros para conseguir información adicional o siempre que creas que podamos serte de ayuda.
¡Que tengas un buen día y mucha suerte con la jardinería!
Todo el equipo de Famous Roses.